lunes, 26 de septiembre de 2016

LA CHAMÁ de Juan Zamora Pozo

El autor en la biografía No especifica que es natural de Villanueva de Córdoba como si se avergonzase de ello. Nos relata como se vivía la aceituna a finales de los cincuenta y principios de los sesenta; mostrando las vicisitudes propias de la fanegería. No muy bien informado sobre algunas cuestiones, tales como que el "porompompero" que tocaban en la noche de ronda era un pasodoble, o que las afueras del cortijo lo nombra en una ocasión como PATIO bien es sabido que a ello se le llama PATÍN. Tampoco se asesoró sobre el jabalí, cuyos jamones no se podían curar para comerlos como los de los ibéricos., ni tiene tocino como para repartir a dos kilos para cada falimia de las que componían la cuadrilla de aceituneros; la morcilla se fabrica de diferentes formas y con ingredientes disitintos segun poblaciones, pero el elemento imprescindible para ella es la SANGRE, pero si el jabalí abatido en lo alto de un monte rueda hasta un regajete con la consiguiente dificultad para sacarlo y llevarlo al cortijo, cuando llega a éste no hay ni gota de sangre en su interior, probablemente quería recrear en su escrito la matanza casera y no se documento ni sobre lo uno ni lo otro y aun habiendo nacido en el pueblo a buen seguro que no presenció ninguna

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